JJOO. Para empezar, nada de nada.

España - Corea

El primer día de competición de los Juegos nos ha traído varias decepciones que sumar a la que nos proporcionó el equipo de fútbol contra Japón el jueves. La prueba de ciclismo en ruta, el balonmano femenino, la eliminación de Fernando Verdasco en tenis, la de la judoka Oiana Blanco, y la actuación de Mireia Belmonte en la final de los 400 metros estilos han sido un constante goteo de malas noticias en este primer día.

Equipo español de ciclismo

En ciclismo, ni los favoritos británicos, con un equipo compuesto prácticamente por corredores del equipo Sky que pagaron el desgaste del reciente Tour, ni los españoles, cada uno a lo suyo, pudieron sacar medalla. Se echa de menos aquellos Juegos y Mundiales en los que se corría para Freire o simplemente se corría en equipo y la carrera dictaba quién era el jefe de filas. Pero parece que hoy en día es muy difícil que se entiendan y colaboren dos presuntos gallitos que al final resultaron no ser tan favoritos. 

Mireia Belmonte

Una vez tratada aquí la eliminación del inconsistente Verdasco, la mayor decepción la proporcionó quien, a buen seguro, había creado las mayores expectativas. Esto siempre es así. De Mireia Belmonte se espera mucho. Tras el batacazo de Pekín, nos aseguraron que llegaba con un gran momento de forma y de madurez. Se metió en la final con la quinta marca de las ocho clasificadas y terminó en la última posición. Perdió tres puestos y nadó de más a menos en la primera prueba, algo que puede resultar demoledor de cara a las siguientes que le tocará nadar en los próximos días. Esperemos que realmente tenga ese punto de madurez que nos pregonaban, aunque hoy, de momento, no se presentó ante la prensa después de la final. Mal asunto.